Tres almas en pena, abandonadas al olvido de una sociedad cosmopolita y por consiguiente, ocupada de por vida. Tan solo tres almas en pena dan argumento suficiente para extraer la risa y el llanto en cuestión de segundos a un público sobresaturado: ANTIGONA EN NUEVA YORK Y sino es así, ¿A quién le importa? yo fui feliz y además aprendí, disfruté y viví junto a gente que siempre recordaré. GRACIAS PEDRO LANZAS
En ciego apoyo a mi CINE ESPAÑOL, me encuentro con escenas que deberían ser marcada como producto nacional. Esto es España, esto es la realidad..simplemente considero maravilloso este monologo realista.
Licenciada en Arte Drámatico y con más de tres años de experiencia, Marta Pavón, la REINA CUENTACUENTOS, no sólo se nutre de las numerosas veces que ha traído la fantasía y la imaginación a los niños, sino que presume de gozan casi tanto como su público en cada una de sus actuaciones.